Iglesias
Corresponde a la Compañía de Jesús que llegó a Tunja en el año 1611 en el Siglo XVII. En el año 1614 estuvo en Tunja San Pedro Claver, en su año de probación, pues este Convento Jesuíta tuvo importancia a nivel nacional.
Este templo fue construido en las primeras décadas del Siglo XVII; en el año 1623 fue convertida en parroquia. Tuvo tres cofradías: La de la Virgen del Pilar, la de Santa Bárbara y la de las Ánimas. Lo más bello de esta iglesia son sus altares, el arco toral, el artesonado y los cuadros coloniales. El arco toral presenta incrustaciones de madera con decoraciones de elementos vegetales. En las techumbres encontramos florones con racimos o plantas tetrafoliadas; casetones hexagonales, octogonales y cruciformes.
Ubicada en la Carrera 11 entre Calles 20 y 21. Es una de las más importantes casas solariegas hoy convertida en capilla y convento de la comunidad de las clarisas fue mansión del Gobernador y Procurador de la Provincia de Tunja Don Bernardino de Mujica y Guevara, en la segunda mitad del siglo XVI.
Es una de las joyas arquitectónicas más bellas de la ciudad de Tunja, que sobreviven del período hispánico. Su construcción se inició en el año 1571, cuando se fundó el primer convento de monjas que se estableció en el territorio nacional. Su fundador fue don Francisco Salguero con su esposa Juana Macías de Figueroa. En la capilla de Santa Clara hay altares cuidadosamente tallados y cuadros antiguos de Santa Clara y San Bernardino de Sena; igualmente obras de los pintores Vásquez Arce y Ceballos, los artistas Figueroa y otros.
El Templo de Santo Domingo de nuestra ciudad, es una de las joyas arquitectónicas coloniales más importantes de la América Latina. Tanto las naves como sus hermosas y artísticas capillas, entre ellas la de Nuestra Señora del Rosario, constituyen un tesoro de arte y decoración de los más representativos y característicos del siglo XVI.