Hidrografía

El sistema hídrico  regional de Tunja al conjunto de corrientes y depósitos de agua que existen en el territorio municipal  ya sea superficiales o subterráneas, y que se integran con el sistema hídrico regional. La forma particular como los ecosistemas locales disponen, regulan, conservan y distribuyen el agua sobre su territorio o  al interior del relieve, constituye el sistema hídrico natural.  Sin embargo la acción ah trópica derivada en obras de infraestructura, establecimiento de usos, cantidades y frecuencias de consumo del agua que proporciona la naturaleza, redefine  al sistema hídrico  manipulado, el cual esta constituido por acueductos, embalses, redes de conducción y tratamiento.

El sistema hídrico natural

Lo conforman el conjunto de corrientes superficiales que aun discurren  como lo son:

Ríos:

  1. El Jordán
  2. La Vega
  3. Las Cascadas.

Así mismo, por los nacederos, humedales y el conjunto indefinido de corrientes transitorias de escorrentía superficial existentes en las cimas de las montañas que aún conservan cobertura vegetal alrededor de Tunja. Del sistema forman parte también las aguas subterráneas y depósitos naturales de agua freática.

 

Sistema hídrico artificial

 El sistema regional, esta conformado por:

  1.  La Represa de Teatinos ubicada entre los Municipios de Ventaquemada y Samacá.
  2.  La red de conducción, los tanques y subsistemas de distribución. 
  3.  Así mismo, hace parte de este sistema el conjunto de pozos profundos perforados en el área urbana de Tunja para extraer agua subterránea.

La dinámica de los sistemas hídrico natural y construido depende de las condiciones climáticas globales, regionales y locales que definen los regímenes pluviométricos. Por estar tan íntimamente ligada la hidrografía tunjana, esta también contempla la cuenca del Río Teatinos, las de los Ríos Jordán y La Vega y sus principales afluentes.

La importancia de la Microcuenca del Río Teatinos radica en el aporte que efectúan, los cauces principales del Río Teatinos y la Quebrada El Cortaderal al suministro de agua para el acueducto de la ciudad de Tunja.

Cuenca del río Teatinos: Consta de dos subcuencas adyacentes:

  1. La Quebrada Cortaderal (la cual surte los acueductos del casco urbano de Samacá, el rural de Puente Boyacá y en temporadas secas al de Tunja).
  2. La del Río Teatinos en su parte alta, estas se unen aproximadamente en la cota 3000 m.s.n.m. sobre un pequeño valle.

A nivel regional se destacan los siguientes sistemas:

Laguna Verde: se destaca como un ecosistema sobresaliente y un área de recarga y nacimiento de 3 Has, ubicado entre la Quebrada Cortaderal y el Río Teatinos. Además, a ésta se asocian humedales donde se desprenden corrientes superficiales que drenan a la Quebrada  El Cortaderal.

El Embalse de Teatinos: en el cual se han retenido mediante un muro de contención las aguas del Río Teatinos para abastecer el acueducto de la ciudad de Tunja.

La falta de un control permanente en la zona del Embalse de Teatinos y Laguna Verde, convierte a estas zonas frágiles en vulnerables a las acciones transformadoras. Estas áreas deben estar totalmente aisladas y protegidas dada su importancia en el mantenimiento de la oferta de agua para la ciudad de Tunja.

Las Microcuencas de los Ríos Jordán  y La Vega: son fundamentales por su aporte a la Cuenca del Río Chicamocha y por su ubicación con respecto a Tunja. Cuando el Río La Vega tiene su punto de encuentro con el Río Chulo, éste ya ha recibido todos los efluentes de la ciudad. De esta forma la Cuenca Alta del Río Chicamocha se ha mantenido contaminada por varias décadas y ha generado varios efectos nocivos hacia los municipios que se encuentran en la Cuenca media y baja del Chicamocha.

El Río La Vega:  es el componente principal de la Cuenca, tiene una  relativa juventud interrumpida por las acciones del hombre y de drenaje dendrítico. Se clasifica hidrológicamente como oval redonda a oval-oblonga, así el flujo torrencial se retarda en épocas críticas dando sedimentación y en épocas máximas  de flujo torrencial produce desbordamientos con alto transporte de sedimentos produciendo riesgos de inundación en la parte baja de la microcuenca.

Existe un déficit en el recurso hídrico, por que a pesar que hay buen número de cauces que pudieran ser aportantes de éstos, solo hay algunos pequeños caudales en las Quebradas de la Puerta, El Salitre, El Cangrejo y el Infierno. Del Río La Vega salen 7 acequias que llevan el agua por gravedad a reservorios que son usados en riego en cultivos ribereños.

Es muy notoria y severa la deforestación de las zonas húmedas y ojos de agua; así mismo, las prácticas de zangeo y pisoteo del ganado, han llevado desencadenado los siguientes problemas:

Resecamiento, disminución de afloramientos hídricos y modificación del ciclo hidrológico.

Alteración de cauces naturales, posibilitando la conformación de surcos erosivos y alteración de las zonas húmedas y de recarga de acuíferos de lo que conlleva a la disminución de caudales.

La estructura hídrica de toda la región esta en condiciones marginales en cuanto a recarga hídrica, dada la alta intervención de las cuencas en general y en especial de las zonas de protección, por lo que las condiciones de oferta para los acueductos veredales y para el casco urbano de Tunja se consideran que presentaran mayores conflictos.